Ciudades resilientes al clima en América Latina - Planeamiento participativo e implementación de acciones para la resiliencia al clima: el caso de Santa Ana (El Salvador)
Santa Ana es la segunda ciudad de El Salvador y necesita urgentemente prepararse para hacer frente a desastres y adaptarse a los retos que plantean la variabilidad y el cambio climático. Según el censo del 2015, tiene una población de más de 265.000 personas y está creciendo cuatro veces más rápido que otras ciudades intermedias del país.
El crecimiento urbano descontrolado genera presión en los servicios públicos, la vivienda y la infraestructura, entre otros. Todo ello plantea graves desafíos a la capacidad para reducir el riesgo y construir resiliencia a eventos geológicos y climatológicos, particularmente a inundaciones severas provocadas por lluvias, identificadas por los actores locales como el peligro principal.
En este contexto, durante 2017, Santa Ana ha sido parte del proyecto “Un enfoque participativo de toma de decisiones hacia la resiliencia al clima y desarrollo urbano inclusivo en América Latina,” que busca a través de la investigación–acción, explorar y construir un portafolio de opciones para la resiliencia al clima y desarrollo urbano en las ciudades seleccionadas (Dosquebradas en Colombia; Santa Ana en El Salvador; y Santo Tomé en Argentina).
Este portafolio ha sido construido de manera participativa con los actores locales e institucionales del Municipio y define una serie de acciones a ser implementadas para fortalecer la resiliencia al clima. La clave para un buen resultado ha sido la articulación interinstitucional municipal y con actores locales, aprovechando las oportunidades y características del territorio, su población y los procesos de desarrollo en curso.
El estudio llega a tres conclusiones:
1. Es necesario fortalecer el trabajo participativo y la colaboración entre una diversidad de actores locales, con conocimientos, capacidades y recursos diferentes, y operando a distintas escalas.
2. Además de las soluciones a corto plazo, es importante desarrollar una estrategia de desarrollo urbano resiliente a largo plazo respaldada por una regulación que controle el desarrollo en la zona sur para no aumentar el riesgo de inundación en centro y norte de Santa Ana.
3. El portafolio de opciones que se identificó en reuniones de la Mesa de Cambio Climático es muy importante para iniciar el proceso para el desarrollo de la resiliencia climática en Santa Ana.